El diputado sueco Karl Nordblom ha propuesto reducir el impuesto al juego para que los operadores puedan ofrecer condiciones más competitivas, lo que a su vez debería ayudar a los jugadores legales a afrontar el mercado negro.
La propuesta llega pocos meses después de que el impuesto al juego se aumentara al 22% cuando el gobierno no hizo caso de las advertencias del sector. Según un informe reciente del regulador sueco del juego, el nivel regulatorio del país está mejorando con la nueva metodología, pero aún no está en el nivel deseado.
El regulador afirma que la tasa de alcantarillado es del 86%, aunque algunas estimaciones, incluida la asociación industrial BOS, sugieren que la cifra podría ser significativamente menor. Legisladores como Nordblom dudan que la industria del juego legal pueda manejar la situación por sí sola.
"La mayoría de los jugadores han advertido que el nivel de alcantarillado, es decir, el volumen de juego que tiene lugar en el mercado sueco autorizado, está disminuyendo", dijo. Para apoyar a la industria, es posible que los legisladores tengan que dar un giro de 180 grados, ya que enfrentan dificultades para interpretar los datos provenientes del sector.
El argumento es que la presión gubernamental sobre el mercado regulado no está deteniendo las operaciones en los mercados extraterritoriales, lo que lleva a que los actores sigan alejándose de ofertas menos competitivas en el segmento con licencia. Algunos expertos dicen que es un error disuadir a los proveedores de garantizar que sus juegos no sean utilizados por empresas extraterritoriales que apuntan al mercado regulado.
Además, el BOS afirma que el aumento de impuestos en julio reducirá los niveles de alcantarillado en un 2,5%, lo que a su vez empeorará los problemas con el juego. Aunque estos datos son difíciles de confirmar, las previsiones poco optimistas tampoco ayudan a la situación del sector. Las propuestas de reducción de impuestos de Nordblom no son anticompetitivas ni perjudiciales según la evidencia disponible.
Sin embargo, resolver el problema de reducir los niveles de alcantarillado no se reduce simplemente a ajustar la tasa impositiva. Se necesita más acción. La Inspección reconoce desde hace tiempo la complejidad de este problema y se ha comprometido a examinar más de cerca el mercado negro para determinar el mejor curso de acción para abordarlo.