En el mundo actual de las apuestas deportivas, la presión sobre los apostadores aumenta constantemente. Incluso ganar en el campo no protege a los atletas profesionales de apostadores descontentos.
Jackson: la victoria del equipo es más importante que el desempeño personal
Recientemente, Lamar Jackson, mariscal de campo de los Baltimore Ravens, expresó su frustración en una publicación en Platform X. Señaló que muchos apostadores se preocupan más por sus apuestas que por las victorias reales del equipo. Jackson enfatizó que esta actitud es evidente independientemente del resultado de los partidos.
El 29 de septiembre, su equipo obtuvo una aplastante victoria sobre los previamente invictos Buffalo Bills con un marcador de 35-10, mostrando un alto nivel de juego. A pesar de esto, Jackson enfrentó críticas por sus estadísticas personales, a pesar de que el equipo ganó.
El mariscal de campo totalizó sólo 156 yardas aéreas, lo que parece no haber cumplido con las expectativas de quienes apostaban por sus logros individuales. En su publicación, Jackson enfatizó que el fútbol americano es un juego de equipo y el desempeño individual no es tan importante si el equipo gana.
Posteriormente comentó que para él el fútbol siempre ha sido y sigue siendo un juego de equipo, donde el resultado principal es la victoria del equipo y no las estadísticas personales. Jackson, dos veces ganador del MVP, reconoció que el desempeño individual pasa a un segundo plano cuando se trata de ganar un juego. Los Baltimore Ravens, dijo, juegan para ganar, no para satisfacer las expectativas de los apostadores.
El problema del acoso a los deportistas
El acoso a los deportistas por parte de apostadores descontentos se ha convertido en un problema grave. Desde la derogación de PASPA en 2018, las apuestas deportivas legales se han extendido rápidamente por todo Estados Unidos, atrayendo a millones de personas. Desafortunadamente, muchos de estos nuevos participantes en el mercado de las apuestas tienen poco interés en el deporte en sí y están más centrados en sus ganancias potenciales.
Especialmente alarmante es la situación de la persecución de los jóvenes deportistas que compiten a nivel universitario. Esto ha dado lugar a numerosos pedidos de prohibición de ciertos tipos de apuestas para proteger a los jugadores jóvenes de estrés y presión innecesarios.
La NCAA ha sido una firme defensora de la prohibición de las apuestas sobre el rendimiento individual de los atletas universitarios, argumentando que ayudaría a preservar la integridad del deporte y reduciría los riesgos para los jugadores jóvenes.