Las expectativas de ingresos de Bet-at-home para 2023 se han ajustado, principalmente debido a un número desproporcionado de resultados deportivos desfavorables en las ligas de fútbol destacadas durante el período de agosto a octubre. Esto ha tenido un impacto negativo en los márgenes de las apuestas deportivas. A pesar de estos desafíos, Bet-at-home aún cree que puede lograr un EBITDA positivo para el año, con una estimación inicial que oscila entre -3,0 millones de euros y 1,0 millón de euros. El operador también señaló posibles efectos puntuales relacionados con la liquidación de Bet-at-home.com Entertainment, que actualmente está en proceso de liquidación y que han tenido un impacto positivo en la estructura de costos y ganancias.
La revisión de las previsiones responde a una disminución de los ingresos en la primera mitad del año. Los ingresos brutos por juegos se situaron en 24,2 millones de euros en el primer semestre, lo que representó una caída del 9,3% con respecto a los 26,7 millones de euros obtenidos el año anterior. Esta disminución se atribuye a los cambios regulatorios en Alemania, una fuente importante de ingresos para Bet-at-home, en particular la implementación de límites mensuales para las apuestas desde el 1 de julio de 2022. Sin embargo, el EBITDA se triplicó durante la primera mitad del año, aumentando de 1,1 millones de euros a 3,8 millones de euros, gracias a medidas de reducción de costos en toda la empresa.
Bet-at-home ha enfrentado tiempos difíciles, cesando sus operaciones en varios mercados clave y saliendo del mercado austriaco debido a desafíos legales. Además, el negocio maltés creado para dirigirse al mercado austriaco acumuló pasivos sustanciales, lo que expuso a Bet-at-home a un mayor riesgo de liquidez. La empresa también renunció a su licencia en el Reino Unido después de que una investigación de la Comisión de Juegos de Azar revelara deficiencias en la lucha contra el lavado de dinero y la responsabilidad social.