Continúa la Saga de la Lotería Nacional del Reino Unido: Richard Desmond Desafía la Victoria de Allwyn

Richard Desmond, fundador de Northern & Shell, buscará indemnización de la Comisión de Juegos de Azar del Reino Unido (UKGC) por no seleccionar a su empresa como operadora de la Lotería Nacional. A pesar de que Camelot retiró sus reclamaciones y se unió a Allwyn, Desmond persiste en su desafío, alegando "errores manifiestos" por parte del UKGC en el proceso de selección. Argumenta que su empresa, respaldada por alianzas con importantes instituciones financieras, habría tenido un mejor desempeño sin los supuestos errores.

Partidario declarado del Brexit y del UKIP, se espera que Desmond base su disputa en la supuesta falta de retroalimentación adecuada por parte del UKGC, lo que podría haber influido en su decisión de retirarse de la competencia. Su equipo planea apelar a las leyes de la Unión Europea aún aplicables en Gran Bretaña, haciendo hincapié en la "obligación del demandado de cumplir con cualquier ley de la UE". Los daños buscados podrían ascender a £200 millones, afectando potencialmente los fondos para buenas causas.

El UKGC defiende su decisión, afirmando que la oferta de Northern & Shell quedó corta en comparación con Allwyn y Camelot debido a planes de negocios y buenas causas subóptimos. Allwyn, el sucesor elegido, presume de una sólida alianza con gigantes financieros como Barclays, HSBC y Société Générale. A pesar de esto, la inminente batalla legal plantea preocupaciones sobre posibles implicaciones financieras para el fondo de buenas causas de la Lotería Nacional.

El diputado conservador Damien Moore critica el desafío de Desmond, instándolo a abandonar la demanda. El Partido Conservador desaprueba los desafíos legales que podrían privar a las organizaciones benéficas británicas de fondos significativos. Moore enfatiza la necesidad de aceptar la decisión de la Comisión de Juegos de Azar y enfocarse en el prometedor futuro de la Lotería Nacional.